Con cada sesión de taihenjutsu mi cuerpo se vuelve un poco más ágil, un poco más flexible y me hago un poco más consciente de mis propios fallos. Sin embargo mi meta no es la perfección, eso lo he descartado hace mucho, más bien es esforzarme y ser mejor cada día y superarme cada día. El título de este post es ∞ (infinito) ya que esto es lo que siento cada día, en cada sesión. Por mucho que exponencialmente avances (5°, 10°, 15° Dan) en tus grados SIEMPRE regresarás a tus bases.
Redacción Satori Dōjō.